Son las 4 de la tarde, y por una casualidad me encuentro “sola” en la casa, claro que son buenos momentos deseados, mi edad produce tal preocupación a mis seres queridos, que dudo me den soledad para llenar apenas dos páginas de estas, que gracias a Dios son misivas quiero que mis renglones grabados no sean indescifrables, es algo que ocurre; que solo mi hija puede penetrar en mis escritos…mi querida hija, ¿qué dirá ella? Posee tal caudal de recursos, como creados para estar al lado de una madre a la que la edad la va dejando sin sus fuerzas, y sin embargo una fuerza muy sentida que nace de dentro del SER, es la que me permite realizar las cosas, como cuando las fuerzas y los ímpetus de vida estaban en sus plenas facultades, solo sé, que gracias a ella estoy escribiendo, esto es algo que ni en mi juventud, ni en mi vida como hija y madre pude llevar a cabo.
Os diré que ella hace que vea de cada momento lo hermoso del nuevo día que nos acompaña, y que sin esta fuerza no podría saltar de la tierra al cielo, y que mis pensamientos ya viejitos, sepan nacer con tal vigor, que me siento joven en espíritu y que lo positivo sea mi compañía, dejándome que goce de todo lo que la existencia me depara, pues con AMOR mi SER me lo da, y una paz infinita penetra en mi, haciendo que me sienta realizada como mujer, sí como mujer, como cuando tenía 40 años, incluso cuando pase esa edad aun mas llena de ilusiones, de adolescente. Y esto lo logro y lo expreso porque llevo vividos casi 92 años, ya que pronto los cumplo, mas lo que en mi cuenta, lo importante, donde está la vida es mi Presente, aquí en este 29 de Agosto, que estoy viviendo, me siento viva, la vida es AHORA y ¡es tan bonito sentirlo! Quiero dejarlo aquí grabado para que se lea y se sepa, para que cuando ya no pueda escribirlo lo leamos juntos. Estoy esperando que de un momento a otro el teléfono suene, y que oiga la voz de mi hijo “mama estas aun sola ¿voy?”, y le conteste “cariño, no hace falta, estoy muy bien viendo la tele”…está encendida mas ni la escucho os lo aseguro.
¿Por qué será que ahora que Dios me está dando tal lucidez de espíritu siento este bienestar en mi SER entero?... es como si mi alma brotase como una flor, henchida de cosas sublimes, bellas y se háyase en el principio de la existencia, porque tal y como yo me noto, no podrá ser humano saber cómo me hace de feliz vivir mi presente, aceptar plenamente la vejez como madre y abuela, este es el evangelio de mi vida.
Me noto de tal forma satisfecha, y agradecida ya que Dios hizo que naciese, que viera su creación, y llegase a este momento con esta carga de dicha y ansias de vida, deseando que lleguen los seres queridos, que todos vean que de verdad llevo una vida de felicidad, verlos felices a ellos y que por algo inexplicable Dios quiere mi llegada a este Presente, con mis momentos de vejez así de dichosa, pero sobre todo noto que mi mente no recibe lo que mi espíritu no desea, que tengo ilusiones positivas, tan llenas de verdaderas ansias por seguir aquí con todos, que ni por un segundo noto que ya carezco de energías, para ejecutarlas, y me asombro de esta felicidad de tener ante mi toda una vida vivida, mas también una nueva, en la que como ahora estoy “sola”, y muy acompañada….No, no me siento sola.
